
Después de los genocidios y exterminios, los desastres, las guerras y los regímenes de terror, parte de las sociedades que se han visto expuestas y heridas luego de estos sucesos han tomado el impulso para generar espacios de memoria, para conocer la verdad, para castigar, reparar a las víctimas y evitar posibles repeticiones en el futuro. Ya sea por medio de las llamadas "políticas públicas" o por iniciativa de los colectivos sociales, la memoria puede darse sobre diversos formatos.



















