
La violencia machista no cesa, por mucho que arranquemos una página más del calendario. La última víctima conocida ha sido Antonia, asesinada por su expareja en Huércal de Almería, pero no ha sido la única en lo que llevamos de enero. El primer día del año nos despertábamos con la noticia de que una mujer, Matilde Teresa, había sido apuñalada en Rivas Vaciamadrid, también por su expareja. Y los casos, por desgracia, no terminan ahí.



















