• Según los empresarios las políticas públicas ponen trabas a la flexibilidad.
• Según Recchi, los jóvenes inician la universidad para ''alagar un período de indecisión''.

El presidente de la petrolera italiana ENI, Giuseppe Recchi, así lo expresó en el foro del consejo para el futuro de Europa, organizado por el Instituto Berggruen para la Gobernanza.

Ante una pregunta acerca de la dificultad de los graduados para encontrar empleo al finalizar la carrera, el empresario afirmó que los universitarios inician sus estudios "para alargar un periodo de indecisión" y que "van a la universidad porque hay que hacerlo. Hago esto y luego ya iré viendo". Arguye que en Europa debe impulsarse más el modelo anglosajón en el que se forma gente "más responsable y participativa".

Continúa con que para revertir esta situación los gobiernos deben limitar el tiempo de decisión y dirigir la formación inmediatamente a los sectores en los que los nuevos estudiantes sean necesarios. Sin embargo afirma que las políticas públicas no suponen más que un impedimento para la competitividad de las empresas y que los gobiernos deben hacer todo lo posible para proporcionar un clima de comodidad a los empresarios, eliminando trabas de tipo burocrático y añadiendo "flexibilidad laboral".

Las palabras de Recchi no son otra cosa que resonancias de las pretensiones que sistemáticamente la burguesía trata de imponer a los estudiantes y a los trabajadores. Se resume en una mayor implicación de las empresas en las instituciones de enseñanza en las que puedan dirigir a su gusto el potencial del estudiantado. Por otro lado la "eliminación de trabas burocráticas" y la "flexibilidad laboral" no suponen otra cosa que entregarle carta blanca a la patronal en términos de despidos, contratos precarios y en general pérdida de derechos y de capacidad defensiva para los trabajadores.