Hace unos días salía a la luz el estudio realizado por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud "Crisis y contrato social: los jóvenes en la sociedad del futuro(*)" que arrojaba datos muy interesantes sobre la percepción de la situación económica, política o su propia situación laboral.

El estudio, de más de 200 páginas, recogió las impresiones de mil jóvenes entre 18 y 24 años que, por otra parte, nada tienen de noticia.

Respecto al empleo el 48,6% de los encuestados aceptaría trabajar en cualquier empleo, en cualquier lugar y por un sueldo bajo. Y un 61,7% prevé tener que salir al extranjero en busca de un trabajo. El 80% admite estar convencido de que tendrán que depender económicamente de la familia; un 85% trabajaría ''en cualquier cosa'' y el 79,2%, ante las perspectivas actuales, afirma que tendrá que seguir estudiando. El 75% no cree que encontrará trabajo en menos de un año.

Respecto a los estudios, el 70% tiene la intención de retomarlos. No obstante, 53,2% admitió que su último trabajo no tenía relación con los estudios cursados y sólo un 13,2% sí encontró un trabajo acorde a su formación.

La situación futura tampoco es halagüeña para los jóvenes encuestados, sólo el 20% cree que vivirá mejor que sus padres mientras que casi el doble piensan lo contrario.

Finalmente los jóvenes consideran que empresarios y banqueros son los culpables de esta situación (50,7%) y consideran necesario la movilización como respuesta (un 47%)

Estos resultados, como hemos comentado, no arrojan nada nuevo. Estos datos sólo corroboran una triste realidad que viven día a día miles de jóvenes y que ya hemos teorizado los CJC en numerosas ocasiones: el ejército de reserva de parados permite una puja a la baja de los salarios (es decir, hace que el 85% de los jóvenes encuestados diga desesperadamente que trabaja en cualquier cosa o que casi el 50% lo haga por un sueldo bajo). Ni la formación académica asegura ni un nivel de vida digno ni un trabajo acorde con lo estudiado (como refleja que el último trabajo de más del 50% de los encuestados no se correspondía a sus estudios). Además, la única salida capitalista a la crisis es más explotación y condiciones de miseria, situación percibida por el casi 40% de los jóvenes que aseguran que vivirán peor que sus padres. Fruto de esta percepción del futuro también se desprende el hecho de que el 61,7% baraje la posibilidad de salir al extranjero a trabajar; a otros países donde los trabajadores no tienen condiciones mejores, sino, a veces, simplemente, menos malas.

Como nota positiva queremos resaltar el alto porcentaje de jóvenes que señala de forma acertada a la clase social explotadora (empresarios y banqueros). Estos datos no hacen más que demostrarnos que, lejos de lo que quiere vendernos la burguesía, el análisis marxista es certero y actual. Y, sin duda, la nota más esperanzadora es ese 47% que aboga por las movilizaciones.

Referencia:

(*) Rodríguez San Julián, Elena y Ballesteros Guerra, Juan Carlos [online] Crisis y contrato social. Los jóvenes en la sociedad del futuro. Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud. Disponible en: http://www.injuve.es/empleo/crisis-y-contrato-social-los-jovenes-en-la-sociedad-del-futuro

Ana Escauriaza es miembro del Comité Central de los Colectivos de Jóvenes Comunistas.