Si eres un joven inconforme al que le duele ver las injusticias que nos rodean a diario estoy seguro que en algún momento has pensado en organizarte junto a otros jóvenes para cambiar esta situación. A mí me pasó y me sigue pasando día a día. Hoy quiero contarte mi pequeña historia, una historia de experiencias y aprendizajes que tal vez te sirvan. Hoy te voy contar como se ha ido construyendo el Partido Comunista y su Juventud en mi ciudad, León, desde mis ojos militantes, desde mi corazón comunista.
Mi primera experiencia de lucha en León fueron las movilizaciones contra la guerra de Irak. Por aquél entonces tenía 16 años y una intuición positiva hacia las hoces y los martillos. Sin embargo no empezaría mi militancia comunista hasta los 20 años, en el último año de carrera y tras volver de una experiencia laboral en El Salvador que me marcaría de por vida. Sería la tierra de Farabundo, de Monseñor Romero, de Roque Dalton, del Comandante Marcial, de Schafik Hándal quién acabase de evolucionar mi intuición en firme compromiso político con la clase obrera.
Mis primeros años de militancia fueron en la UJCE. Por aquél entonces los CJC daban sus primeros pasos en León combinando la lucha juvenil con las tareas partidarias. Fue en la intervención de masas dónde conocí el programa y la ideología de los CJC. Desde la unidad de acción conseguimos construir un movimiento estudiantil unitario, combativo, de base y firme en la defensa de los derechos de los estudiantes contra los ataques del Plan Bolonia.
En el movimiento obrero los ataques contra el sector de la minería se recrudecían. Los comunistas de León no dudamos en apoyar las luchas de la cuenca Ciñera-Matallana. Las luchas mineras de 2012 supusieron para todos nosotros la mejor escuela de lucha posible. Asambleas, manifestaciones, cortes de carretera, la Marcha Nocturna, la Marcha Negra hasta Madrid... En España algo estaba cambiando, todas las miradas eran para los mineros, ni los telediarios podían esconder el papel que comenzaba a jugar la clase obrera en la lucha social. ¡Estábamos tan orgullos!
Sería durante los períodos congresuales de 2013 en la UJCE y los CJC que decidiese cambiar de proyecto político. No fue una decisión fácil, mi militancia en la UJCE en León fue una gran escuela, allí conocí a auténticos militantes de la Revolución que a día de hoy siguen siendo un ejemplo. Sin embargo todas las luchas compartidas los años anteriores con los CJC, la errada estrategia hacia la ruptura con el poder burgués de la UJCE, la práctica como criterio de verdad y adecuación táctica a nuestros objetivos y las continuas traiciones de la dirección del PCE a la clase obrera fueron motivos más que suficientes para cambiar de trinchera.
En aquél momento los CJC en León ya no eran una organización pequeña tanto en cantidad como en calidad política. Ya eran un referente de la lucha de clases en León. Varios cuadros del movimiento estudiantil se habían incorporado a las filas de la Juventud Comunista, así como otros jóvenes comunistas venidos de la UJCE. Era un momento de una gran ilusión y alegría. No había semana que no interviniésemos en movilizaciones obreras, estudiantiles o por los derechos sociales.
La inauguración del Centro Obrero y Popular "El Candil" en febrero de 2014 fue un punto de inflexión para la organización. Tras años de compromiso militante al fin el proyecto comunista en León contaba con un espacio propio donde generar una verdadera alternativa popular en el barrio de El Ejido y la ciudad de León. En El Candil hemos hecho tantas actividades que sería imposible relatarlas aquí todas. Talleres semanales de apoyo escolar, idiomas, bailes, guitarra, defensa personal, conciertos, charlas, exposiciones, teatro, recitales de poesía, fiestas, comidas... El mejor aprendizaje extraído de esta experiencia es que el Partido y su Juventud necesitan de espacios donde compartir con la clase trabajadora nuestras preocupaciones pero también nuestro ocio, nuestra cultura, nuestra felicidad y nuestros sueños. ¡Defender la alegría como una trinchera!
En esta etapa el trabajo entre la clase trabajadora ha sido una prioridad. El Partido y su Juventud han sido parte activa y referentes de las movilizaciones de las trabajadoras de la limpieza de la Universidad, de las educadoras del MUSAC, de los obreros del metal de Vestas, de los compañeros y compañeras de Everest, de los y las teleoperadoras del puntero sector local del telemarketing, de los obreros de la empresa de cables Miguélez, de los y las trabajadoras de la Enseñanza y, por supuesto, de los mineros de nuestra provincia sin cuya lucha el Partido Comunista y su Juventud en León no serían lo que son. Con los mineros y sus familias aprendimos a vivir, aprendimos a luchar, aprendimos a soñar. Y hasta el día de hoy juntos soñamos, despiertos, por el futuro del sector.
Uno de los momentos más duros para nosotros fue el 28 de octubre de 2013 cuando un fatídico accidente en la mina enterraba en carbón a seis compañeros. Carlos, Moure, Antonio, Orlando, José Luis, Roberto. Sus nombres aún retruenan como aquélla explosión en nuestros corazones. Recuerdo como si fuera hoy cuando tres meses después subimos al pozo donde murieron, blanqueado por la nieve, con una pancarta que rezaba "Sois ejemplo de unidad, rebeldía y dignidad. Por vosotros, ¡juramos luchar hasta vencer!". Y aquí seguimos luchando, firmes y humildes, dignos y comprometidos, seguros de la victoria.
En julio de 2014 acogimos el I Campamento de la Juventud que en esta edición se llamó "Por la Paz y contra el imperialismo". Las faldas de nuestra montaña central acogieron a más de 150 jóvenes de todo el país. Este campamento es más que un Escuela de Formación para comunistas, el campamento es un referente formativo, de debate, de ocio sano y alternativo para la juventud junto a la que luchamos todo el año. Para nosotros fue una responsabilidad y un orgullo poder inaugurar en nuestra tierra este ambicioso proyecto que ya cuenta con tres exitosas ediciones.
A finales de 2015 se creaba en León la célula del PCPE "Teresa Monge" en honor a la joven militante de las JSU asesinada por el fascismo en La Virgen del Camino. Con la recuperación orgánica del Partido Comunista en León se culminaba un ciclo abierto unos ocho años atrás. La célula del PCPE no habría sido posible sin la dirección de la Juventud Comunista sobre todo el proyecto político. De la creatividad y esfuerzo de la Juventud Comunista en abarcar sus tareas propias y las partidarias es que hoy podemos contar con una célula bolchevique con cuadros experimentados en la lucha obrera y la lucha de masas de todo el pueblo. Así mismo este 22 de octubre celebrábamos la I Conferencia Regional del PCPE en Castilla y León con cerca de 50 asistentes. ¡Un gran éxito!
La Juventud Comunista no es sólo una Escuela de Cuadros, la Juventud Comunista es una Escuela de Vida. La Juventud Comunista es el agua, el aire y la luz que todo joven inconforme necesita. La Juventud Comunista es nuestro presente y el seguro de vida de nuestro futuro. Militar en la Juventud Comunista es compromiso por cambiar el mundo y seguridad de que cambiará nuestra vida. Militar en la Juventud Comunista es simplemente vivir de otra forma, vivir con la ilusión de que es posible construir una sociedad con abundancia, justicia y libertad. Joven inconforme: te invito a soñar con nosotros y nosotras. Porque como decía Lenin "es preciso soñar pero con la condición de creer en nuestros sueños, de examinar con atención la vida real, de confrontar nuestra observación con nuestros sueños y de realizar escrupulosamente nuestra fantasía".