Si alguien miró las páginas online de los períodicos de principios de noviembre, se encontraría, en un lado, abajo, una noticia sin mucha repercusión -porque, para qué-: Se convoca una huelga en Pontevedra, en Bershka, por parte de la plantilla de 74 mujeres y un hombre (la proporción no es aleatoria). Pocas huelgas llegan a nuestros oídos hoy en día, más aún si la noticia que vende está en Cataluña y en Venezuela, pero menos aún se plantean contra el gigante entre gigantes de España, Inditex.

Tras dos años de negociaciones de la patronal con las y los trabajadoras del sector de actividades deportivas de Araba, se tomó la decisión en asamblea, de ir a la huelga del 23 al 31 de julio. La nefasta negociación de empresas como Aiteko y Disport (siendo las mayoritarias), conjuntamente con el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz y la Diputación provincial, acarrearon inevitablemente la convocatoria de la huelga huelga. Esto trajo el cese de servicios públicos muy concurridos en la provincia, tales como las piscinas en verano.

Hoy en TR entrevistamos a un trabajador de la start up Glovo que nos cuenta la situación laboral que se vive en esta empresa emergente o compañía de arranque a la que muchos jóvenes de extracción obrera y popular se ven obligados a vender su fuerza de trabajo para ganar un mísero salario durante el verano.

Hoy en Tinta Roja entrevistamos a Raquel Serrano, una de las trabajadoras del Tommy Mels de Alcalá de Henares que hace unas semanas se decidieron a denunciar públicamente el impago de sus nóminas y a iniciar una lucha contra la franquicia por sus derechos salariales y para mantener sus puestos de trabajo. Una experiencia valiosísima que la juventud obrera hostelera ha de aprender y aplicar, y que hemos visto imprescindible añadir a nuestra campaña veraniega por la organización obrera en el sector.