Violeta Parra fue una artista polifacética chilena, que reavivó el folclore y la música de su pueblo. Desarrolló otros artes como la escultura y la pintura, aunque es recordada principalmente por su faceta de compositora y cantautora, donde supo recoger en sus canciones el sentir del pueblo chileno. Es considerada un referente para generaciones posteriores de artistas chilenos y de habla española en general. Ella compuso el famoso "Gracias a la vida", un himno al regalo que es la vida, una de las canciones más hermosas y versionadas de su cancionero.
Violeta Parra nace en 1917 de un matrimonio entre un profesor de música y una campesina. Las dificultades económicas y los cambios de residencia fueron la tónica en su niñez. Desde pequeña, ella y sus ocho hermanos se interesaron por el espectáculo y la música. A temprana edad aprende guitarra y canto, pero no fue hasta que se instaló en Santiago cuando empezó a ganarse la vida componiendo y tocando en bares y salas de fiesta, junto a varios de sus hermanos. En uno de estos locales, conoció a su primer marido, Luis Cereceda con el que tuvo dos hijos: Ángel e Isabel.
Su matrimonio no duro mucho, pero Luis era militante en el Partido Comunista de Chile, y ella pronto se introdujo en los temas políticos, como en dicho partido. Poco después en 1949, nacería su tercera hija, Carmen, de la unión con Luis Arce, con el que se casaría ese mismo año, y tres años después nacería una cuarta llamada Rosita, que moriría a los dos años. En esta época, Violeta comenzó a recorrer las zonas rurales de todo chile, recopilando canciones tradicionales del folclore local, y revitalizando canciones y estilos antes olvidados. Con estos éxitos, empezó sus primeros viajes por Europa. Destaca su estancia en Paris, y el efecto que produjo la enigmática ciudad gala en ella, coincidiendo con una etapa de gran creatividad y producción de la artista.
Sus obras y actuaciones sirvieron de propaganda y difusión de la música popular chilena por todo el mundo. Ya finalizando la década de los 50 fundará el Museo Nacional del Arte Folklórico, y escribirá varios discos, como Canto y guitarra o La cueca. En ellos encontramos sus canciones más reivindicativas, de carácter social y comprometido, como "Por qué los pobres no tienen". Ya en su etapa final, su vida estuvo marcada por dos acontecimientos clave: su relación amorosa con Gilbert Favre, un suizo con el que vivió entre Paris y Ginebra; y la fundación de una gran carpa en la comuna de La Reina, con intención de convertirla en un referente cultural y un motor del folclore local. De esta etapa de su vida son sus temas más románticos y apasionados, variando entre el despecho y el amor intenso, como en "Corazón maldito".
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Su relación con Gilbert se terminó de una forma muy dolorosa para la artista, cuando él la abandonó y se marchó a Bolivia donde se casó. Esta inestabilidad emocional se agravó al coincidir con el fracaso de su iniciativa con la carpa folclórica. Es ahora cuando escribe sus últimas canciones, como "El Albertío" y la más famosa "Gracias a la vida". Todo ello desembocó en varios intentos de suicidio, y finalmente el 5 de Febrero de 1967 Violeta Parra a los 49 años de edad se suicidó en su carpa de La Reina.
Violeta Parra es sin duda alguna, la esencia de la música popular chilena, y una gran influencia en toda la música y el arte de su tiempo. Tanto sus hijos, como autores posteriores han versionado muchas de sus canciones. Sus devenires vitales y amorosos, hicieron de Violeta desde el principio una artista con una gran fuerza en sus letras, y mucha cercanía en su estilo sencillo y asequible a todos. Nos dejó ese himno a la humanidad, a la vida, su canción más famosa "Gracias a la vida". Fue escrita en un momento muy difícil para ella, y analizándola detenidamente se advierte el sentido de despedida, de desasosiego. Así Violeta firmaba su adiós al mundo, un mundo que ella vivió con toda su intensidad y sentimiento. El pueblo chileno la ha reconocido como una parte fundamental de su cultura, de su música, de su historia. Todos los amantes de la música, del sentir popular y la cultura han dado innumerables veces las gracias a esta magnífica cantautora. Gracias por su arte, por su energía, por su legado. Gracias Violeta Parra.
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Para saber más:
www.fundacionvioletaparra.org
www.memoriachilena.cl
SÀEZ, Fernando: La vida intranquila : Violeta Parra, biografía esencial. Chile: Ediciones Radio U. de Chile, 1999
