Funk carioca: desde el grito de la favela

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Hoy, en Tinta Roja, queríamos hablar del funk carioca, una música nacida en las favelas de Rio de Janeiro sobre los años 80 que, al mismo tiempo que refleja su realidad diaria, están envueltas de un gran estigma por la sensualidad de sus bailes y letras y por su relación con la delincuencia. Llegando a estar hasta perseguido, este estilo se ha alzado como el favorito de la juventud y durante los últimos años ha traspasado tanto las fronteras de las favelas y de Rio de Janeiro como las de clase social.

Para hacernos una pequeña idea de este estilo, muchos de sus temas llegaron a nuestras fronteras y forman ya parte de nuestro imaginario colectivo. Ejemplo sería el “Follow me follow me” de Blak Alien & Speed, que pondía música a un anuncio de coches (https://www.youtube.com/watch?v=N03q8tqvRXI), la artista inglesa M.I.A., que se inspira en este estilo para algunos de sus temas (https://www.youtube.com/watch?v=zHsguxaa8gg) y, especialmente, el “Rap das Armas”, que podría banda sonora a la película Tropa de Élite y a gran parte de nuestras discotecas. En esta canción, además del típico ritmo del estilo, también está presente una de sus temáticas recurrentes, esto es, la violencia extrema contra la policía.

 

Los inicios recuerdan a los de otros géneros (el jazz, la cumbia, el rap, la samba, el reggaeton...) y guardan una estrecha relación con las raices indígenas y africanas. Es el grito de la juventud obrera y popular frente a la realidad que viven día a día: drogas, violencia, represión, explotación... A su vez, es criticado por la simpleza de sus ritmos y letras, incluso por ser de alto contenido misógino (recordemos, a su vez, que la violencia contra la mujer en Brasil goza de bastante impunidad, siendo el 6º país en mujeres asesinadas según la ONU). No obstante, la mujer poco a poco asoma la cabeza, y si bien la mayoría de representación de este género es masculina, ya hay grandes símbolos femeninos como Anitta. Esta cantante mezcla el funk con el pop, y quizás sus canciones puedan sonarnos más familiares respecto a lo que oímos en nuestras radios. Ponemos como ejemplo su “Sow das Poderosas”.

 

Este es, sin duda, un género de música amplio, en el que nos podemos encontrar tanto letras que incitan al consumo de drogas (en el subgénero “Funk Proibidão”, en el que se enmarcara el Rap das Armas) como con letras que denuncian la realidad de las favelas y tienen un alto contenido de protesta. La canción que ponemos a continuación, por ejemplo, suele estar presente en las manifestaciones antirrepresivas.

Eu so quero é ser feliz

andar tranquilamente

na favela onde eu nasci... e!

Cidinho y Doca, los autores de este último tema y del mencionado Rap das Armas, cuentan en su producción con grandes temas de cierto contenido social que recomendamos, a pesar de la barrera lingïstica.

Asimismo, cabe mencionar este tema, sobre los desalojos y militarización de las favelas (https://soundcloud.com/manoteko/contagem-regressiva-mano-teko-e-mc-lasca-prod-jorginho-matarazo) en contraposición con el funk que intentaba promocionar los Juegos Olímpicos. (https://www.youtube.com/watch?v=RKP_owXNq_I). Podemos hablar, así, de todo un subgénero (llamado Funkciente) que denuncia sin temblar las injusticias que viven, muchas veces a costa de su propia vida (ver nota 4)

Para hablar de la historia del funk irremediablemente debemos hablar del sustento que hacen ciertas bandas criminales a algunos grupos de este género, siendo una via perfecta para transmitir a la juventud sus ideas. La persecución del funk ha venido acompañado de estos hechos, no obstante, para muchos de los habitantes de las favelas la inseguridad se ha acrecentado con la presencia de policía militar en sus barrios.

Durante los últimos años el género se ha ido expandiendo y ya hay academias de baile y música que estudian este género. No obstante, los jóvenes siguen de sufriendo las presecuciones y prohibiciones, y el funk (frecuentemente acompañado de grandes dosis de alcohol y algún que otro consumo de drogas) parece ser que continuará siendo una de las pocas opciones de diversión que tiene la juventud en esos barrios. Una realidad, en esencia, no muy diferente a la que podemos tener aquí al respecto.


Notas:

  1. 1.Postura de nuestro partido hermano en Brasil, el Partido Comunista Brasileño, al respecto: https://pcb.org.br/portal2/2400
  2. 2.“La policía no hace redadas en fiestas de vecindades ricas donde circulan bastantes drogas”, dice Pimentel. “Y en muchas favelas, la policía deja que los traficantes operen la mayor parte de la semana, y escogen llevar a cabo las redadas cuando los residentes están disfrutando de su tiempo libre y estánsu autoestima. Si la policía realmente tomara en serio reducir la violencia en Río, tendrían un mejor control de las armas y municiones, que muchas veces terminan siendo vendidas a traficantes, en vez de hacer redadas en fiestas funk”- https://es.globalvoices.org/2016/08/14/hay-una-cancion-funk-oficial-para-las-olimpiadas-pero-los-artistas-funk-en-rio-dicen-que-enfrentan-persecucion/
  3. 3.Durante las protestas por el Mundial de Rio, un bailarín, Douglas Rafel, aparecería asesinado. Poco se esclareció del caso, pero la sospecha de que fue asesinado y torturado por la policía está bastante extendida. Durante su entierro se realizó una manifestación contra la violencia policial, donde las consignas vendrían acompañadas de cantos funkis. La protesta, a su vez, vendría acompañada de disturbios que se saldaron con un muerto. - http://elcomercio.pe/amp/mundo/latinoamerica/violencia-copacabana-durante-entierro-bailarin-asesinado-noticia-1725061
  4. 4.Grupos de personas se manifiestan en puertas de centros comerciales, en Río de Janeiro. Bailan funk carioca, gritan y corean consignas contra el "racismo de los centros comerciales" que vetan la entrada de los afro descendientes. http://www.eldiario.es/turing/redes_sociales/Brasil-rolezinho-flashmob-vemprarua_0_220128482.html
  5. 5.“Pero por nada de eso la sangre dejó de correr: desde 2010, tan sólo en la Bajada Santista –litoral de San Pablo–, asesinaron a balazos a ocho cantantes funks; y uno más el último agosto, en Florianópolis. Ninguno de esos crímenes, hasta ahora, fue aclarado. Casi todas las sospechas recaen sobre la policía. Los seguidores del funk subrayan que la mayoría de las víctimas cultivaba el “funkciente” (funk consciente), que no adora el delito, pero denuncia las injusticias sociales, la corrupción política, y los crímenes de la policía. La historia puede parecer la misma, pero ningún otro movimiento musical precisó jamás de tanta muerte para poder vivir.” - http://www.infonews.com/nota/109474/al-ritmo-de-las-balas