Rico Rodríguez: Érase un hombre a un trombón pegado

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El pasado cuatro de septiembre nos dejaba Rico Rodríguez, uno de los máximos exponentes del reggae y el ska desde los años sesenta hasta la actualidad. Rico fue uno de esos artistas del género caribeño de importancia mundial, con clase, con calidad. Tocaba el trombón, y con qué maestría lo hacía sonar. Él bebió de la música negra, en especial del jazz y de la salsa cubana, estilos de los que nunca renegó y que siempre trató de implementar junto al reagge jamaiquino.

Nacido en 1934 en Cuba, Rico pronto comenzó a adquirir ciertos gustos por la música negra, por los ritmos caribeños y en especial por la música tradicional de los rastafaris. Esto sucedió porque a pesar de nacer en Cuba, fue criado desde su infancia en Jamaica, en un barrio humilde donde la música era la única salida para cientos de jóvenes como él. Sus inicios estuvieron marcados por la música popular jamaicana y la cultura "rasta". Este proceso propició que Rico comenzara a moverse por círculos de artistas y amigos, que aunque eran reducidos, fueron una forma de dar a conocer su música y sus ideas.

Tras los primeros años de juventud adquirió cada vez mayor madurez artística y se mudó a Londres en 1961, donde conoció a un gran número de compañeros y amigos que como él se buscaban suerte al otro lado del charco. Las tardes de Rico pasarían entre ensayos, conciertos, reuniones y locales junto a su querido trombón.

Unos años después volvió a Jamaica, ya con el prestigio y reconocimiento de muchos de sus compatriotas. Hasta 1970 sacó algunos sencillos junto a Trojan Records, pero sería en la década de los setenta donde colaboraría con grupos como Burning Spears o Jim Capaldi, uniendo el reggae a las melodías de viento de su trombón. En 1976 publicó su álbum más famoso, "A man from Wareika", LP grabado en los Estados Unidos en varios de los mejores estudios del momento. Este álbum permitió a Rico catapultarse a la fama y llegar a actuar junto a Bob Marley y The Wailers en Europa durante su tour en Europa. Los grandes críticos del reggae dicen que "A man from Wareika" es uno de los mejores álbumes instrumentales de todos los tiempos ya que contiene canciones que nos invitan a relajarnos y a disfrutar de la armonía de la música.

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PPero la década de los 80 apremiaba y Rico participó en varias orquestas y bandas fuera del reggae, orientadas hacia el ska y la música que esos años sonaba en los barrios pobres de la periferia londinense. De estos años no queda mucha información sobre a qué se dedicó Rico, sin embargo sabemos que llegó a grabar otros dos discos, "That man is forward" y "Jama Rico" junto a artistas como Liston Johnson, Paul Young o la banda 2Tone, muy popular en aquellos años por combinar los sonidos africanos con el sonido de la música pop británica mundialmente conocida.

En 1987, ya en Jamaica, un grupo de jóvenes músicos suizos ofreció a Rico grabar junto a la Heart Beat Band en Europa, de esta forma Rico volvería a un proyecto de reggae que gozaba de grandes perspectivas de futuro. En todos los rincones del mundo el reggae y el ska eran conocidos, en parte gracias a la figura de Bob Marley, y gracias a esto el trombón de Rico siguió sonando tan versátil como siempre, unido al reggae. Pero en 1988 abandonó el proyecto de la banda, mudándose de nuevo a Londres y buscando la sobriedad del artista ya consolidado, del viejo trombonista que se pasaba largas tardes en el estudio grabando sencillos y perfeccionando su estilo.

Con el paso de los años Rico ofreció algunos conciertos por los lugares más recónditos de Europa, pero desgraciadamente solo contamos con algunas horas de grabación de shows y música en directo, como por ejemplo unos conciertos en Alemania, Japón y Argentina. La dificultad de encontrar fuentes documentales sobre Rico ha condicionado notablemente el artículo y tan solo hemos podido dar unas pinceladas sobre su vida que, desgraciadamente, finalizaba hace una semana en Londres, a la edad de 81 años y seguramente pegado a su fiel amigo, a su fiel compañero de bailes, a su trombón querido.

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